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Cuba: coraje y valor

TIME prevé la próxima quiebra del Miami Herald

Por Jean-Guy Allard

EL Miami Herald, cuya versión en español difunde diariamente la visión injerencista de América Latina del Departamento de Estado, ha anunciado a sus empleados que eliminará de inmediato 205 puestos de trabajo y recortará drásticamente el salario del resto de su personal. Mientras tanto, la revista TIME prevé, en un amplio análisis del mercado de la prensa escrita, que el Herald será el próximo diario en acogerse al Capitulo 11 de la Ley de Bancarrota.

En una nota distribuida a todo el personal, David Landsberg, el editor del rotativo de Miami, describe cómo será aplicada la "masacre" al conjunto del personal, empezando por los empleados más antiguos que se ven forzados a escoger una jubilación acelerada.

La dirección se encargará de designar a quién tendrá que enfrentar la guillotina.

La eliminación masiva de miembros del personal sucede a medidas anteriores que ya redujeron notablemente los equipos de trabajo de la sucursal en español de este diario bicéfalo propiedad de la cadena McClatchy.

Además de estos despidos, que llevarán a su staff a un peso raquítico, el diario, que pretende tener un amplio mercado de lectores en América Latina gracias a Internet, anuncia toda una serie de recortes, empezando por la eliminación definitiva de estímulos a sus cuadros y el alquiler de un piso entero de su inmueble en venta del downtown Miami, que no encuentra comprador.

Desde hace un año, las acciones de la empresa dueña del Herald, McClatchy, han pasando de los 100 dólares a algunas decenas de centavos.

EL NEGOCIO DE LA INFORMACION IMPRESA EN RAPIDA DECLINACION

Para Time, ya llego el momento del entierro del Miami Herald. En un análisis extenso de la situación desastrosa de la prensa diaria del país, la revista prevé la próxima desaparición del periódico, al cual pronto no le quedará otro remedio que anunciar su bancarrota.

Time recuerda cómo en las últimas semanas se confirmó la rápida declinación de esta industria que ya vivió en diciembre el derrumbe de Tribune Company, editora de los diarios Chicago Tribune y Los Angeles Times.

Según la revista, un mínimo de ocho de los 50 diarios más importantes de Estados Unidos cerrarán en los 18 próximos meses.

Con una circulación de 220 000 ejemplares en sus dos ediciones, el Miami Herald será el próximo en sucumbir, principalmente por la dramática caída de la publicidad inmobiliaria en una ciudad donde este sector atraviesa una crisis profunda desde hace más de un año.

La recia competencia del Sun-Sentinel no dejará al diario miamense posibilidad de sobrevivir, salvo hipotéticamente como publicación digital.

Hace poco, el magnate cubanoamericano del azúcar Alfonso Fanjul y un empresario miamense, Jorge Pérez, intentaron lograr un acercamiento con la McClatchy Company para la compra del edificio del Herald, pero pronto se asustaron ante los enormes riesgos que representaba tal inversión.

Fanjul, dueño de la Florida Crystals, de West Palm Beach, pertenece a una familia de origen español cuyos intereses fueron nacionalizados en Cuba por la Revolución. Los Fanjul producían azúcar en la Isla y se hicieron ricos con los mismos métodos esclavistas que aplican hoy explotando a niños haitianos.

La sucursal en español del Herald tiene una larga historia de colaboración con la inteligencia norteamericana y los elementos más recalcitrantes de la fauna contrarrevolucionaria local a la cual se sometió desde que el fallecido líder de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Jorge Más Canosa, impuso la línea editorial. En la ciudad que fue teatro de todas las conspiraciones multimillonarias de la estación JM/WAVE contra Cuba, el Nuevo Herald retoma constantemente las calumnias contra la Isla.

A pesar de la situación crítica del periódico, sus reporteros siguen asistiendo a las reuniones de la Sociedad Interamericana de Prensa en Madrid, pródiga en ataques contra Cuba.

HEARST ACABA CON EL SAN FRANCISCO CHRONICLE

Mientras el Herald revela a su personal sus medidas de recorte, el sitio Democracy Now publica que en Arizona, "el periódico más antiguo del estado, el Tucson Citizen, anunció que el sábado (21 de marzo) emitirá su última publicación". El rotativo es propiedad de la cadena Gannet.

En la costa Oeste, miembros del mayor sindicato del San Francisco Chronicle se sometieron a medidas de la empresa matriz Hearst, "esenciales para que el periódico siga funcionando"

Los empleados del Chronicle que ya no tenían protección por los años de servicio tuvieron que ceder, según fuentes sindicales, "por el miedo y las amenazas de este vampiro Hearst".

Mientras los trabajadores pagan la cuenta de la crisis financiera, anota la misma fuente, el gigante de los seguros AIG anuncia que pagará 450 millones de dólares en primas a sus altos ejecutivos a pesar de haber recibido 173 mil millones de dólares de rescate de parte del gobierno.

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